martes, 20 de octubre de 2009

walk

Realmente, hoy caminé harto harto harto.
En realidad no tanto, pero terminé cansado.
Fui jugando con las sombras, miré varias veces para atrás y vi cómo no-hacían artes marciales.
Después imaginé muchas muchas cosas, de esas que uno divaga cuando está solo y, aburrido.
Luego me subí a la micro sin pagar y fui leyendo.

Cuando uno no tiene dinero para ciertas cosas, es válido dejar de usarlo en ello?
Una especie de parásito en las propiedades privadas de los grandes empresarios, viviendo quizás hasta como una cucaracha. Escondido y ocultándome con las letras infinitas de un libro. Con la fantasía que te hace creer que lo que lees lo estas viendo, la sumisión a las letras.

Algún día les compraré sopaipillas a los perritos vagos de diego portales con avenida, algún día.


Sigo pensando en el chiste de Heisemberg y me río, es genial xD.