martes, 23 de octubre de 2012

En una bicicleta estática

Pienso que la vida es terrible.
Pensar que tengo que pasar como mil horas acá, sin tener ánimos de hacer tanto ejercicio. Así que me senté en una bicicleta un tanto rara y muevo las piernas, en un circulo infinito un tanto sin sentido.

Tengo que recuperar como seis asistencias según yo, hoy una, mañana dos, y la próxima semana las demás.
Aunque, la única buena noticia del día es que el profe me dijo que solo tengo cuatro inasistencias.
Así que quizás no me quede a un doble turno hoy.
Aunque mañana tendré que hacer aerobox, y baile entretenido. Así que debo avisarle a Miguel.

Otra de las cosas malas que sucedieron hoy, aunque en comparación con la más mala es una nimiedad, la luz delantera de mi bicicleta murió.
Apenas salí a avenida, la luz salto y mientras mis rezos hacia dios eran dictados, una gran camioneta paso por encima de la luz.

Después, enojos y reconciliaciones, siendo odiado mas que odiando, me hubiese gustado no vivir este día.
A mi celular también.
Hasta desearon mi muerte.
Quiero desaparecer.