martes, 4 de septiembre de 2012

Día culiao

Me desperté temprano con la intención de venir a clases, pero ese sueño acumulado de no poder quedarme dormido, una cuota de insomnio y otra de dormitar y no descansar me hicieron optar por no venir al eh.
Me levanté para venir a inglés, pero esa micro que nunca pasó y que me hizo llegar tarde provocó que fuera inútil entrar a clases, si llego tarde no quedo presente.

Me vine al canal, me fumé un cigarro y escribí esto.

Ahora, acabo de hablar con ella y me dice que no veremos la película...

Tenía un sabor agrio

Y bastante seca la boca.
Me levanté a buscar agua a la cocina en el vaso gigante que me regalaron para mi cumpleaños pasado, y mientras los pies se me enfriaban rápidamente pensé que ese estado, al cual aún no le pongo nombre era lo más cercano que puedo concebir como ser adulto. Irónico el hecho que después de afeitarme y parecer aun más un pendejo, estaba más cerca de la adultés, esa que tanto me pediste.

Y me parece un tanto extraña esta situación, siento una seguridad, más como un sino que como una certeza, de que me dejarás, que como eres capaz de aburrirte y desaburrirte rápido no te va a costar olvidarte de mi, y seré solo un capítulo de tu vida, tal vez como un amor de verano que duró más de lo adecuado, pero un amor de verano al fin y al cabo.

En vez de insistir que me aburriré de ti es mejor no hacer cosas que aburren. Siempre es mejor solucionar los problemas y los finales tristes que solo enumerarlos.