jueves, 20 de octubre de 2011

Mi cabeza

Hace tiempo que no tenía un dolor de cabeza que durara tanto.
Además, un cansancio cuatico del cual creo que estoy sicosomatizando la culpabilidad. O no la culpabilidad, sino la autodecepción.
Y el dolor sigue, y sé que no debía escuchar música con esos audífonos, que aumentaban la presión intercraneal y además se escuchaba más fuerte en un lado que en el otro. Pero la otra alternativa era ir escuchando la felicidad de los demás.

Muchas clases, quiero pagar mis deudas y mi bicicleta. Qué cool me voi a ver andando en esa hermosa bicicleta.

E intento entender las respuestas a las preguntas que nunca hice. Que quise hacer, mucho, pero no sabía si hacerlas o no. Al final, lo dejé pasar, como todo lo que me provoca inseguridades. Cómo hubiese sido distinta mi vida si eso no ocurriese.
Y a la vez no sé si debo responder respuestas que quizás no son para mi, pero estoy nuevamente siendo autoreferente en todo. Aunque, tengo esas ganas de tranquilizar, que tan bien me tranquilizan.

Tengo esas ganas de poder asegurar algo, de tener un vistaso del futuro para sentirme seguro en mi actual. Quiero tener un pájaro azul el cual regalar, dejar como evidencia de que las cosas sí importan. Y que quiero hacer algo por ellas.


Y

si hacemos como si nada pasó, y nos bajamos un tequila en mi casa?
De verdad me gustaría.

En diez minutos

Le pediré la bici a mi primo y saldré a hacer clases. Mejor en 15. Me acabo de comer tres hamburguesas al hilo, y la segunda estaba tan grande (el tomate se salía por lo bordes y el pan se rompía) la tuve que comer con cuchillo y tenedor. like a sir.

En mi mano izquierda tengo un punto rojo. Se supone que es un timbre. De qué, ni idea.
Estabamos en la clase de inglés, era la tercera clase (y era la primera vez que iba) y tenias que hablar con seis personas preguntándoles cosas de la vida. Como que nadie se movía y no estaba ni ahí en estar vegetando otra clase, así que me paré y empecé a preguntarle cosas a mis compañeros. Fui el primero en terminar y dije stop. La profe, me mandó a adelante y tuve que leer lo que había escrito. En ese momento me di cuenta que tenía que chamullar de lo lindo.
Cuando leí a mi sexta persona, dije que no le gustaba la carne. Error fatal. El franco dice: sí, si me gusta. Le dije a la profe: :O yo entendí que no le gustaba. Le preguntó a la clase si merecía premio y algunos dijeron que si. Me pidió la mano y me puso su timbre.

Como salí en la mañana, la micro estaba super llena. Me empezaron a picar los pies, ni idea por qué, pero no me los podía rascar. Y cada vez picaban más. Al fin pude sentarme y rascarme, pensando en que cuando llegara me iba a sentar como indio y rascarme los pies toda la clase. Y lo hice.

Al recreo después de inglés, me encontré con los cabros, le regalé una revista super antigua a navaja, y me fumé un tabaco. Como siempre, llegué tarde a la siguiente clase. En el camino pensaba que si el profe me preguntaba por qué había llegado tarde, le diría que es porque soy un irresponsable. No me preguntó.

Me senté al fondo y al rato tuvimos que hacer grupos. Discutimos acerca de la unión europea y les saqué todo el rollo anticapitalista a los cabros. Como que igual no caxaban mucho.
Después se acercó el ayudante, un cabro de derecho de no sé qué año, y lo escuchamos.

Seguimos discutiendo. Hicimos una síntesis. Me gustó el curso aunque tengo que leer harto.

Salí al patio, pedí la PAE. Me junté con la valo y la dani y nos quedamos echados en el pasto, fumando.
Se me hizo tarde y me vine.
Quiero llegar luego a mi casa, hace calor.